Existe la idea generalizada de que una alimentación saludable resulta mucho más costosa que una dieta basada en alimentos procesados y precocinados. Se trata de una confusión muy común, ya que, aparentemente, la comida rápida o ciertos productos preparados salen baratos al pasar por caja, pero la realidad es que, a largo plazo, el mismo alimento preparado por nosotros mismos resulta mucho más económico, por no hablar de sus beneficios saludables.
Te damos las claves para comer barato sin dejar de cuidar la alimentación: